La anatom�a es de todo? menos simple. Los textos cl�sicos de anatom�a estaban basados en una minuciosa descripci�n de cada estructura. No ten�an limitaciones de tiempo ni de espacio. Si un autor precisaba de toda su vida o de realizar cientos de disecciones de cad�ver para exponer sus observaciones, simplemente lo hac�a. Muchas vidas fueron dadas al servicio de estos conocimientos. Pero la sociedad y la ciencia fueron cambiando. La b�squeda de la sencillez, de lo general, se fue imponiendo sobre el detalle y la precisi�n, en una econom�a que limitaba, adem�s, el espacio, la calidad y el gasto. La ciencia se fue reduciendo a manuales peque�os, con dibujos solo esenciales y muchas veces deformados para expresar aquello que se buscaba en una peque�a frase o una flecha. Las universidades perdieron la esencialidad de los conocimientos anat�micos por unos textos elaborados por profesores �nicamente cl�nicos o por comisiones, esquemas generales, clases tipo ?PowerPoint? y res�menes, donde se fue olvidando la ense�anza directa sobre el cad�ver por unas clases masificadas (o vac�as) sobre una mesa digital, en el mejor de los casos.