Envuelto en selvas, enmarcado en arenas doradas, coronado por volcanes, tachonado de ruinas de civilizaciones extinguidas: ese es el sureste asitico que todos nos imaginamos. En la mente de todo viajero estn las fuerzas de la naturaleza (volcanes imponentes, arrecifes coralinos y selvas), la riqueza de innumerables encuentros culturales y fusiones fascinantes, la fuerza de la espiritualidad que lo impregna todo y las megalpolis que se asoman al futuro con un pie en el pasado. El sureste asitico es, sin duda, el gran viaje que hay que realizar, por lo menos, una vez en la vida. |